Miércoles, Enero 1, 2020
Dos operativos coordinados entre Bolivia, Bélgica y la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc) lograron el secuestro de 679,5 kilos de cocaína camuflados en pisos de madera tipo curupaú, cuando la mercancía llegaba desde Santa Cruz al puerto de Amberes, en el país europeo.
 
La intervención, que se logró gracias al Programa Global de Control de Contenedores de la Organización Mundial de Aduanas (OMA), desarticuló una red que traficaba droga a países de Norteamérica, África y Europa al menos desde el año 2009, informaron autoridades antinarcóticas.
 
Producto del operativo, denominado Cristal Verde, la Policía Boliviana intervino en Santa Cruz tres aserraderos, ocho inmuebles y cinco empresas, entre ellas Latin Wood, firma cuyos propietarios son Cornelio Granizo Muñoz, Nelly Granizo Muñoz (ecuatorianos) y Enrique Villarreal Quintero (colombiano), este último buscado por la Policía como presunto líder de la red de tráfico internacional de la que es parte Pedro Montenegro Paz.